Adoptar nuevos hábitos a veces puede resultar todo un reto. A veces porque no estamos acostumbrados, porque no encontramos la motivación real para hacerlo o un sin fin de motivos más, pero para la protección solar no hay excusa que valga. Ya sabéis que nos gusta hacer mucho hincapié en la importancia de la protección solar y en estos tiempos de confinamiento es más importante si cabe.

¿Por qué es imprescindible?

Hasta el 80% del envejecimiento de la piel se produce por la exposición solar, pero este no es el único motivo. La radiación solar es el factor desencadenante de muchos problemas, a parte de las arrugas prematuras: desde la aparición de manchas hasta las consecuencias más graves como el cáncer de piel. 

Úsalo todos los días

Hay algunas teorías que aseguran que si repites un hábito durante 21 días seguidos, ya lo has adquirido. Desde nuestra farmacia no sabemos si esto es realmente así, pero nuestro consejo es que lo añadas como un paso más de tu rutina de belleza antes de salir de casa.  Úsalo todos los días y así no se te olvidará. 

Debe ser el paso anterior al maquillaje

Recuerda que debes aplicarlo siempre después de tu crema hidratante y antes del maquillaje, y esperar unos quince minutos para que penetre completamente en la piel. No es suficiente con aplicarlo solo por la mañana, ya que debemos reaplicarlo cada dos horas. Para ello, si te maquillas en tu día a día, puedes optar por brumas que contengan SPF. 

No olvides el fotoprotector oral

La protección tópica es imprescindible, pero con ella conseguimos como mucho entre un 50% y un 60% de protección. Esto se debe a muchos motivos: no nos protegemos todas las partes de nuestro cuerpo, de hecho nos solemos olvidar las orejas, los párpados o las manos; además, no nos aplicamos la cantidad suficiente ni volvemos a aplicarla cuando deberíamos. Por ello, se presenta fundamental complementar esta protección con cápsulas de protección oral que protegerán a nuestro organismo de manera íntegra.