Las molestias musculares y reumáticas como lumbalgias, tortícolis, calambres y tensión muscular se ven más afectadas con la llegada del invierno, debido a los cambios bruscos de temperatura, nieblas, humedad, bajada de temperatura…
Al sentir el frío, nos encogemos para protegernos de él, contraemos involuntariamente los músculos del cuerpo y, así, somos más propensos a calambres y espasmos.
Las contracturas se producen de forma mecánica como reacción al frío y provocan las temidas lumbalgias, tortícolis…
Consejos de Paz, técnica en farmacia, consejera músculo-osteo-articular:
Abrígate correctamente con distintas capas, para poder adecuarte a los distintos ambientes y sus temperaturas:
- Relaja la musculatura y haz ejercicios de estiramiento para contrarrestar las pequeñas contracciones y que no vayan a más.
- Usa esterillas en las zonas más propensas, sin esperar a que se produzca la contractura.
- Ante los primeros dolores, usa un buen gel analgésico y antiinflamatorio junto con la esterilla.
- Si persisten los problemas, no dudes en preguntarnos por nuestros masajes terapéuticos.
¡Pásate por FragaSaludFarmacia y cuéntanos lo que te pasa! Estaremos encantados de ayudarte. ¡No dejes que el frío te cause problemas!